Un 5 de febrero, pero de hace 98 años, se promulgó nuestra Carta Magna en Santiago de Querétaro. Fue, en su momento, la Constitución más avanzada del mundo, pues contenía varias normas revolucionarias que fueron estudiadas como modelo de justicia social.
En febrero de 1917 el mundo luchaba en Europa. Los bolcheviques todavía no dominaban el espectro político ruso y la única esperanza de redención para las masas estaba en el país llamado México, que acababa de sacudirse de quien lo había gobernado por más de tres décadas.