El Comité “Che Gorio Melendre”; un ejemplo para la juventud del mundo

Honor a quien Honor merece. Durante las primeras ocasiones en que los vimos organizar y realizar con excelencia diversos eventos, nos sorprendió observar cómo estos jóvenes actuaban con madurez extraordinaria y una sensibilidad que denotaba su preocupación por Juchitán. No hubo necesidad de que pasara mucho tiempo para constatar que son unos gigantes de pensamientos claros, de inteligencias privilegiadas y  de convicciones firmes; valores que les dan la distinción de personajes ejemplares para toda la juventud del mundo. Quien dude de esta apreciación, puede juzgar lo que el Comité ha hecho y sigue haciendo por el pueblo y por los que en él habitamos. Cuando sus ejemplos de trabajo sean imitados por otros jóvenes, entonces Juchitán tendrá esperanzas de ser rescatada. Y más vale que empiecen pronto, antes de que se destruya la civilidad.

Por Abel Toledo Gómez

Cualquier intento que pretenda cambiar el estado incorrecto de las cosas, o corregir la descomposición que los seres humanos han provocado en la sociedad, será vano esfuerzo si no nace de la reflexión, la imperante necesidad de que los propios hombres y mujeres que conforman dicha comunidad acepten cambiar su manera de pensar y, consecuentemente, su manera de actuar. En otras palabras, que acepten y se convenzan de que la forma de vida no es la deseada para el presente ni, mucho menos, para el futuro, y que dichas condiciones inaceptables son derivadas de las decisiones y acciones equivocadas en el pasado.

Lograr un proceso de cambio en la mente de los humanos es una labor que muy pocos pueden realizar y lograr. Sobre todo, dado el exceso y sólido conformismo que los medios de comunicación masiva han arraigado en la voluntad de un sector considerable de Juchitán. La existencia de ese conformismo limita los deseos de superación, y desarrolla pensamientos de apatía, desidia e indiferencia. Éstos, a su vez, juegan un papel trascendental en la política, para beneficio de los que hacen de los puestos de elección popular su modus vivendi, toda vez que permiten el cumplimiento de aquella comodina frase de “dejar hacer, dejar pasar”.

La relación entre lo expuesto y la referencia al Comité Autonomista Zapoteca “Che Gorio Melendre”, radica en las labores que vienen realizando y que en el futuro llevarán a cabo los jóvenes brillantes que conforman dicha organización.

Muchas personas de Juchitán no han percibido el papel de agente de cambio positivo que desempeña el citado Comité en todos los ámbitos. Los mensajes y trabajos que con mucho esfuerzo ejecutan estos extraordinarios muchachos, llevan la tendencia de modificar la forma pasiva y un tanto incorrecta de concebir las cosas en diferentes aspectos, pero sobre todo en el contexto social y político. Ellos saben perfectamente lo que necesitan los juchitecos para re-direccionar su camino hacía el estatus deseado.
   
No obstante de la existencia de muchos profesionistas y gente pensante en Juchitán, los jóvenes del Comité Melendre están dando un ejemplo de mucha importancia para la vida política y democrática de la ciudad. Ellos conocen bien los problemas y saben que sin la participación consciente de los juchitecos, la ciudad no saldrá de su crisis y estará destinada al desorden y a la anarquía total. De ahí el interés del Comité por participar en el actual proceso electoral, primero como mediador para el debate público que todos presenciamos. Y aunque los actores no convencieron por sus pobres conocimientos y respuestas a los problemas planteados, el evento sí cumplió con su propósito como tal, y como un ejercicio democrático dirigido al pueblo. 
   
Para quienes no poseen un espíritu de servicio para su pueblo, lo más fácil es quedarse quietos y callados. Sin embargo, el liderazgo de uno de más grandes idealistas y orgullo actual de Juchitán condujo a los integrantes del Comité Melendre a la redacción de un documento que hará historia por su contenido y objetivo final. Se trata de un manifiesto en el que los candidatos a la presidencia municipal se comprometen con sus firmas a cumplir con los siguientes acuerdos: 1.- Sesiones de Cabildo abiertas al pueblo y televisadas; 2.- Creación de un Consejo Consultivo Ciudadano, y 3.- Revisión de los Cinco Ejes para la Paz Social de Juchitán.
   
Todos los que padecemos los males de Juchitán estamos obligados a cambiar nuestra forma de pensar, ver y hacer las cosas. Los jóvenes del Comité Melendre son ejemplo de cómo pensar, decidir y hacer las cosas adecuadamente para que las nuevas generaciones, es decir, nuestros hijos, no digan que llegamos inútilmente a este mundo. 
   
Desde esta tribuna enviamos reconocimientos a Gubidxa Guerrero y todos los integrante del Comité Melendre por sus esfuerzos, por su amor a la cultura en general, su sentido de pertenencia a la estirpe zapoteca, por su convicción y fe de que siempre habrá alternativas para enderezar el rumbo torcido de nuestra ciudad, y por el ejemplo que ponen para toda la juventud del mundo. Ojalá que la juventud de Juchitán, siga el camino de ustedes, por el bien y el progreso de nuestro pueblo.


[Texto publicado en Guidxizá, una mirada a nuestros pueblos, suplemento cultural del Comité Melendre, publicado en EL SUR, diario independiente del Istmo. Año I, N° 50, Dom 07/Jul/2013. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.]