En esta ocasión, Retratos de Nuestra Historia les presenta esta bella imagen de Na María Quecha Ortiz (85 años), originaria de la Villa de San Blas Atempa, Patria Zapoteca.
Desde los 12 años Na María aprendió el oficio del bordado en huipiles. Dicho trabajo era de día y de noche. Muchas personas de diferentes pueblos venían a comprar huipiles confeccionados por ella: “Trabajé los trajes en terciopelo; mi bordado era hermoso. Yo misma pintaba las flores y yo misma lo bordaba, todo bien hechecito”.
Na María comenta que anteriormente se bordaba con un solo hilo, lo que permitía que el acabado de las flores fuera fino. En cambio, las nuevas generaciones utilizan dos hilos para terminar rápido su trabajo.
Na María tuvo una hija a quien heredó su conocimiento.
Palabras de Na María: “Yo no quiero vender mis huipiles porque son herencia para mi nieta”.
Texto en memoria de Na María, quien nos ha dejado en cuerpo, pero su historia siempre estará presente.
[Reseña publicada en Guidxizá, una mirada a nuestros pueblos, suplemento cultural del Comité Melendre, Año I, N° 14, Dom 28/Oct/2012. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.]