La bondad de una vida sencilla

Séneca
De bono vitae humilioris

Séneca

Est mihi rus parvum, fenus sine crimine parvum;
sed facit haec nobis utraque magna quies.
Pacem animus nulla trepidus formidine servat
nec timet ignavae crimina desidiae.
Castra alios operosa vocent, sellaeque curules
et quidquid vana grandia mente movet.
Pars ego sim plebis, nullo conspectus honore,
dum vivam, dominus temporis ipse mei.


La bondad de una vida sencilla

Tengo un campo pequeño, un rédito sin culpa pequeño;
mas la tranquilidad me los convierte en grandes.
Un ánimo no turbado por el temor guarda su paz,
ni teme acusaciones de perezosa inercia.
Llame a otros el castro laborioso y las sillas curules 
y cuanto grandezas busca con mente vana.
Sea yo uno de la plebe, con ningún honor distinguido;
mientras viva, sea yo señor del tiempo mío.



DATO.- Nacido en Córdoba (antiguamente parte del Imperio Romano, hoy en día, ciudad española) en el año 4 a.C., Séneca se erigió como uno de los mayores pensadores de todos los tiempos. Siguiendo la escuela estoicista, guió sus reflexiones, que eran lecciones de humanidad, hacia la búsqueda de la libertad. Sus Epigramas completos fueron traducidos por vez primera al castellano en la edición de la UNAM que utilizamos. 

Texto publicado en la Revista Guidxizá, Año V, N° 12, Jul-Sep de 2008, tomado de Lucio Aneo Séneca, Epigramas, [Introducción, traducción y notas de Roberto Heredia Correa], México, Universidad Nacional Autónoma de México, 2001.


[Texto publicado en Guidxizá, una mirada a nuestros pueblos ―Año II, N° 84, Dom 09/Mar/2014―, suplemento cultural del Comité Melendre en EL SUR, diario independiente del Istmo. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.]