La abuela Marina


Nací en casa de la abuela Marina
vine a este mundo en parto normal
fue por la mano de doña Joaquina
Ilustración: Francisco S.
Regalado Puga
que yo dejé el lazo umbilical

Crecí jugando y reía 
no sabía más
la mano   la cara sucia 
qué felicidad


Luego el saludo   las primera letras
y con los dedos saber contar
el primer golpe de amor   la inocencia
de amarla sin besarle jamás

Al toque de la campana
en grito estallar
regreso a casa   una ruta
no sabía más

Voy hacia allá
dulce madera   mojado el pan
hondo el mirar
de negra tela el antifaz

Voy hacia allá
tirando piedra   bañado en sal
recia la faz
de marinero soy capitán

Supe más tarde del miedo y la ira
cuando el clamor irrumpió fatal
por todas partes la gente corría
sangrada noche   oscuridad

Pero en el alma existía 
fuerza sin igual
orgullo que provenía 
desde tiempo atrás

Con piedra y palo y furor en las venas
luchó mi pueblo y venció al final
momentos sí de dolor   de grandeza
que en mi conciencia quedaron ya

Hoy recordé la proeza
y otras cosas más
de lejos viene la brisa
y esa música

Soy de allá
donde se vive con dignidad
soy de allá
donde se muere por libertad

Soy de allá
donde mis hijos retornarán
quiero volar
tocar el cielo donde tú estás

Soy de Juchitán   Juchitán
árbol  eterno   estrella fugaz
soy de Juchitán   Juchitán
corazón tierno   nube ancestral

Soy de allá
donde se vive con libertad
soy de allá
donde se muere por dignidad

Soy de allá
donde mis hijos retornarán
quiero volar
tocar el cielo donde tú estás

Soy de Juchitán   Juchitán
silbante viento que viene y va
soy de Juchitán   Juchitán
nutria del sueño retornarás

Soy de Juchitán   Juchitán
río risueño resonarás
soy de Juchitán   Juchitán
luz en el tiempo no morirás



Texto publicado en la Revista Guidxizá, Año VI, N° 14, Julio-Septiembre de 2009. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.