Relevo Generacional

                                 
Al Dr. Salvador Carrera por los 
  diálogos aporéticos que sostuvimos

Llamé así a mi artículo porque en él quiero opinar sobre la juventud en la vida política.

Marisol Gama
Pareciera que como “jóvenes” debiéramos tener una forma exclusiva de ver e interpretar nuestro entorno, cuando en realidad la juventud implica un rango de edad simple y llanamente; un estar jóvenes, no un ser jóvenes. El que muchas personas cambien de parecer en una edad madura tampoco quiere decir que los “adultos” piensen contrariamente a los jóvenes ni que tengan ideas caducas, pues conocemos a personas mayores que mantienen las convicciones heredadas de tradiciones de resistencia bien afirmadas, y a muchos jóvenes de los que da tristeza hablar.

Sectorizar a la población arbitrariamente es reduccionista. Por supuesto que hay sectores vulnerables, quienes por el hecho de ser como son o estar como están, son discriminados. Ejemplo: las mujeres, los indígenas, los “jóvenes” etc.; y al exigir la igualdad de oportunidades y la eliminación de todo trato discriminatorio por características físicas, de género, culturales, etc., no se hace más que seguir el camino justo. Pero de ahí a pensar y reconocer diferencias intrínsecas a cada sector, por pertenecer a dicho sector (ser lo que son o estar como están: Ser mujeres o estar jóvenes) me parece ignorancia; como cuando se dice que los jóvenes son “soñadores”, “limpios”, “incorruptibles”, “valientes”, etc.; o que los adultos son “conformistas”, “vendidos” o “corruptos”. Si en nuestra vida cotidiana vemos coincidencias con los ejemplos señalados, se debe a las circunstancias propias de la vida diaria que pueden hacer de un adulto alguien más prudente, mas no “miedoso”, y de un joven alguien más arrojado mas no “valiente”, pero sin significar que “lo propio” de estar adulto sea la prudencia ni “lo propio” de estar joven sea el arrojo.  A mi modo de ver, hay diferencias que sí pueden ser identificables, como la fuerza física del joven (por la edad en que sus cuerpos están en su plenitud) y la experiencia del adulto (lógicamente, por los años vividos). Ninguna de ellas es negativa. Al contrario, una combinación adecuada de la prudencia y experiencia de nuestros mayores, con la energía y fortaleza que proporcionalmente tenemos los jóvenes, sería magnífico y haría a un pueblo íntegro.

La corrupción se debe erradicar en donde se halle (mujeres y hombres, adultos y jóvenes) pues no es “lo propio” de ningún sector: ni étnico, ni de género, ni laboral. Y la capacidad debe valorarse y aprovecharse en donde se encuentre, que tampoco es exclusiva de la población mayor -como mucha gente piensa-, ni de ningún otro sector. 

Reconozco que hay discriminación en la política, pues pocos dan espacios a un joven por el hecho mismo de estar joven. Es muy dañino no tomar en cuenta los méritos ni la capacidad de la persona. Hay quienes dicen que un joven piensa por el interés colectivo antes que el personal, pero eso, tampoco es “lo propio” de estar joven, sino que debería serlo de todo político.

¿A México (incluyendo organizaciones políticas, civiles, artísticas, etc.) lo salvarán los jóvenes? Dependerá de su capacidad, tanto, como la de los “adultos” demostrarlo. “Lo propio” de estar jóvenes no es rescatar países, aunque sí cuentan con más posibilidades estadísticas pues son mayoría, y muchos (no todos) se han salvado de vicios que hay en la vida política por su inexperiencia, no por “lo propio” de estar jóvenes. (Ustedes me dirán ¿qué es “lo propio” de estar jóvenes?: sólo el periodo de edad, que es transitorio, responderé)

¿A México lo salvarán las mujeres? Dependerá se su capacidad, tanto, como la de los “hombres” demostrarlo. “Lo propio” de ser mujeres no es salvar países... (¿Y “lo propio” de ser mujeres?: sus características físicas, reproductivas, etc., que son “naturalmente” permanentes)

¿A México lo salvarán los homosexuales, indígenas o intelectuales? Dependerá de su capacidad... “Lo propio” de ser indígenas, homosexuales, o intelectuales, no es salvar países... 

“Lo propio” de la especie humana es: nacer, desarrollarse, reproducirse y morir. Todo lo demás son hábitos, tan modificables por un sin fin de circunstancias históricas y culturales, como usar camisa negra o roja, como ser honesto o no serlo, como ser responsable o no serlo, como ser respetuoso o no serlo, como tener ciertos VALORES que no tienen certificado de origen.

¿Relevo Generacional?, relevo sí, pero no generacional; simplemente sustitución del elemento viciado por uno más capaz y honesto que no necesariamente estará joven. Puede ser que, proporcionalmente, quedemos atrás. Relevo de Valores, Relevo de Actitudes, es lo que hará mejor a nuestros pueblos.


______________________________
Texto publicado en Istmo Autónomo (hoy Revista Guidxizá - Nación Zapoteca), Año I, Núm. 4, Enero-Febrero de 2005. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.

Istmo Autónomo (hoy Guidxizá) es una revista cultural sin fines de lucro editada por el Comité Melendre de manera periódica.