A finales de septiembre del presente año, el Comité Melendre propuso al Ayuntamiento de Juchitán la implementación del Programa Integral de Seguridad y Convivencia Vecinal (PISCV), diseñado por dicha organización comunitaria como resultado de la labor de once años de trabajo cultural y social en diversas poblaciones zapotecas, así como de la experiencia reciente impulsando el modelo de "juntas vecinales".
En lugar de aceptar la propuesta de la sociedad civil, el Municipio optó por esquivarla, demostrando falta de sensibilidad política para atender el problema de la inseguridad, que se ha convertido en una de las exigencias más importantes de la ciudadanía. Además, pretendió remedar el proyecto de forma burda, retomándolo casi íntegramente, pero sin reconocer a sus impulsores.
No obstante lo anterior, el Comité Melendre optó por ejecutar el PISCV con las organizaciones genuinamente vecinales que así lo solicitaran.
El 13 de octubre, la Junta Vecinal Guendalisaa (la primera que se fundó en Juchitán, que ha instalado alarmas vecinales y establecido un Protocolo de Seguridad con excelentes resultados) aprobó en Asamblea su incorporación a dicho Programa, en el marco del cual se han realizado varias actividades culturales exitosas, que han fortalecido los lazos comunitarios, coadyuvando a la labor en pro de la seguridad ciudadana, que vienen haciendo cientos de vecinos desde el mes de junio.
El 20 de octubre, se sumó al PISCV la Junta Vecinal Daniel C. Pineda, organización que funciona en las calles Obregón, Morelos y Reforma, así como en los callejones Leones y La Ventosa de la Segunda Sección.
Esta última Junta Vecinal fue la que este sábado 21 de noviembre de 2015 realizó su tercera función de cine al aire libre, luego de que en semanas previas se realizara en la calle Morelos y en el callejón de los Leones, respectivamente.
Más de ciento veinte vecinos pudieron disfrutar de una película de Goro Miyazaki (hijo del célebre Hayao), que se suma al acervo de Studio Ghibli: Cuentos de Terramar. En las funciones anteriores se proyectó Minúsculos, así como La oveja Shaun.
Previo al inicio de la función, la comunidad pudo escuchar a Chedxi Man, que acompañado de El Cheko y otros jóvenes juchitecos, animaron a la concurrencia con sus temas en rap y reggae en lengua zapoteca.
Esta semana correspondió a los vecinos de la calle Reforma (entre Obregón y Morelos) organizar la vendimia, cuyas ganancias se destinan a mejoras en la zona.
Con esta actividad se reafirma la convicción de que una sociedad organizada y participativa puede recuperar la tranquilidad y restablecer los lazos vecinales y familiares para encaminarse hacia el bien común. Se demuestra asimismo que la ciudadanía, a pesar de las autoridades omisas, puede impulsar eventos de forma autogestiva y enteramente comunitaria.