EDITORIAL 82
Grupo humano que no sabe adaptarse, difícilmente sobrevive. Cada pueblo tiene que aprender a acomodarse a los nuevos tiempos. Sin embargo, cada uno debe hacerlo a su manera. Varios rechazan toda novedad tecnológica, creyendo que ello forzosamente modificará valores ancestrales. Sin embargo, en la habilidad de aprovechar las herramientas contemporáneas reside la clave de muchas naciones.
La radio y el internet son medios de comunicación que se generalizaron en el siglo veinte. Ambos, instrumentos capaces de reproducir el discurso oficialista, o la propia perspectiva de las comunidades, según sea el caso. El Comité Melendre se ha preocupado por aprovechar estos vehículos de divulgación para hacer más grande el eco de nuestras voces. Y en el marco del Día Mundial de la Radio, presentamos dos gratas noticias: la vinculación con Radio Zacatecas, 97.9 FM, y el convenio colaborativo con Fusión Radio, 96.1 FM.
En esta ocasión Guidxizá, una mirada a nuestros pueblos presenta una reflexión del maestro Jaime Martínez Luna, zapoteca serrano originario de Guelatao, a propósito de las radios comunitarias. También compartimos un bello poema de Ramiro Pablo Velasco, publicado en la Revista Guidxizá hace algún tiempo. Los invitamos a apreciar una bella fotografía antigua, cortesía de Memoria Gráfica Zapoteca, y reseñamos la más reciente emisión de Nuestros Pueblos, Nuestra Historia, programa radiofónico del Comité Melendre. En los Gráficos, presentamos a Vicente de la Rosa, joven unidalguense.
Ningún medio debe desaprovecharse en la tarea por divulgar las artes y la cultura. Ante la educación oficial, debemos crear alternativas de instrucción que permitan reconocernos como ramas de un mismo árbol.
[Texto publicado en Guidxizá, una mirada a nuestros pueblos ―Año II, N° 82, Dom 16/Feb/2014―, suplemento cultural del Comité Melendre en EL SUR, diario independiente del Istmo. Se autoriza su reproducción siempre que sea citada la fuente.]